Pertenece al sistema trigonal y está clasificado dentro de los óxidos. El hematite es una mena muy importante de hierro a nivel industrial aunque también es usado a nivel de decoración y joyería así como elemento de pigmentación. Podemos encontrar hematite prácticamente en cualquier lugar del planeta.
El nombre de Hematite procede del vocablo griego “haimatites”, que significa sangre, en referencia al color rojo de su raya. Traducido en 79 por Plinio el Viejo como haematites («parecida a la sangre»), en alusión al vívido color rojo de su polvo, es posiblemente el primer mineral cuyo nombre lleva el habitual sufijo -ita.
Es particularmente eficaz para asentar y proteger y para armonizar mente, cuerpo y espíritu. Protege el alma y la enlaza con el cuerpo durante los viajes astrales. Tiene un poderoso elemento yang, equilibra los meridianos y disuelve la negatividad, impidiendo que las energías negativas entren en el aura. Psicológicamente da apoyo a las mujeres tímidas, expande la autoestima y el instinto de supervivencia. Potencia la voluntad y la fiabilidad e imparte confianza. Mentalmente estimula la concentración y el enfoque. Potencia la memoria y los pensamientos originales. Físicamente, el hematite tiene una poderosa conexión con la sangre. Ponla en la base y en la parte alta de la columna o donde sea más apropiada para su función. No debe usarse durante largos periodos de tiempo.
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